La espiral, ¿qué significaba para los pueblos de la antiguedad?

La espiral, ¿qué significaba para los pueblos de la antigüedad?

La espiral es un símbolo universal expresado por el ser humano. La espiral se ha encontrado representada en infinidad de culturas alrededor del mundo, en todos los continentes desde hace miles de años. Se encuentra representada en todos los ámbitos de la vida desde la forma de las galaxias hasta la estructura de nuestro ADN.

Para las culturas antiguas, la espiral ha significado muchas cosas. Ha sido un símbolo que representaba la creación y evolución del Universo y se utilizaba para representar el tiempo y el movimiento de las estrellas. Como el universo en cierto modo es infinito, la espiral siempre ha representado esto, el infinito de nuestra realidad.

Muchas de estas culturas que representan la espiral son la celta, griega, maya, Ibera, etc.

Se han encontrado espirales en multitud de culturas alrededor del mundo y aún no hemos conseguido descifrar de una manera exacta lo que intentan decir y representar. En la cultura Ibera por ejemplo se han encontrado representaciones en vasijas y otros artilugios.

 

Para los celtas, la espiral simboliza la vida eterna, que no tenía ni principio ni final, sino que era un ciclo. Los celtas tenían la espiral muy presente. Se representaba en armas como corazas y cascos en donde se intentaba representar una especie de protección para la lucha. Estas espirales se han encontrado en tumbas célticas donde se quería representar el ciclo que culmina con el renacimiento o la resurrección. Simbolizaba el movimiento de la vida en ciclos eternos.

 

Según las culturas aparentaba el crecimiento, la expansión, la fuerza vital y la energía del cosmos.

Los expertos la interpretan como la concepción cíclica de la vida y del tiempo. En el Neolítico se reproducían espirales en pinturas y megalitos, también en la cerámica de las tumbas en el antiguo Egipto, en la etapa predinástica del Gerzense o Nagada II de hacia el 3500-3300 a.C. Para los egipcios representaba la creencia de la vida después de la muerte. Las espirales representan la muerte del individuo.

En un ánfora se ve representado a Aquiles dando muerte a la amazona Pentesilea y esta misma porta una coraza con espirales. En la cultura íbera las espirales también se representaban con guerreros.

Desde un punto de vista enfocado a la realidad, la espiral es el arquetipo esencial de nuestra psique. La tierra surgió a partir de un movimiento en espiral, incluso en el aspecto más insignificante de la vida, la espiral está presente. Describe los movimientos de las estrellas, la rotación del universo, el movimiento de las galaxias e incluso cuando tiras de la cadena la espiral es importante.

En lo referente a la cultura griega encontramos la historia del laberinto del Minotauro (Laberinto de Creta) que para la civilización Minoica representaba el laberinto construido por Dédalo para esconder el Minotauro. La leyenda del laberinto se desarrolla en el palacio de Cnossos.

También podría tomar como referencia a la cueva de Gortina en la misma isla de Creta o las danzas que se celebran en las islas Egeas en las que los danzantes recorrían un trazado laberíntico cogidos de la mano.

La leyenda de Ícaro y Dédalo.

Dédalo fue el arquitecto ateniense que fue desterrado a la isla de Creta. Él fue quien construyó el laberinto encargado por Minos para encerrar al Minotauro el cual era aplacado periódicamente con sacrificios humanos.

Dédalo junto a su hijo Ícaro fueron encerrados en el laberinto con el minotauro. Dédalo construyó para él y su hijo unas alas de cera con las que subió escapando de los muros del laberinto, sobrevolando el Mediterráneo pero Ícaro desobedeció a su padre y voló cerca del sol. Los rayos del sol derritieron las alas y cayó al agua.

El rey Minos impuso que Atenas enviara cada 9 años, 7 doncellas y 7 donceles en la flor de la vida destinados a ser devorados por el minotauro. Cuando hubo de cumplirse por tercera vez la obligación, Teseo, el príncipe ateniense, con el consentimiento de su padre, decidió designarse como uno de los 7 jóvenes, con el propósito de dar muerte al minotauro y terminar con el sufrimiento de los atenienses de la tiranía de Minos.

Ariadna, hija de Minos y Pasifae se enamoró de Teseo y le enseñó el sencillo ardid de ir desenrollando un hilo a medida que avanzara por el laberinto para poder salir más tarde. Teseo acabó con la vida del Minotauro y volvió siguiendo el hilo hasta Ariadna y juntos salieron de Creta.

Entonces, ¿qué representan en realidad los personajes que aparecen en esta historia? Y ¿cuál es el trasfondo real de la misma?

La espiral representaba al sol para los antiguos habitantes de Irlanda. Cuando la espiral giraba en el sentido de las agujas del reloj, se estaba representando al solsticio de verano. Cuando la espiral giraba en el sentido contrario a las agujas del reloj, se representaba al solsticio de invierno. En cuevas de Irlanda ha aparecido la doble espiral con bastante frecuencia. Se han encontrado representaciones sobre el 5000 a.C de dobles espirales cuyo diseño consiste en dos espirales continuas (donde termina al primera espiral comienza la siguiente). Esto representaba la conexión entre el día y la noche, el nacimiento y la muerte…

Para los mayas, la espiral simbolizaba el momento cero de su cosmología es decir, el solsticio de invierno.  

Para los hinduistas, la doble espiral representa la evolución y la involución. 

En la prehistoria, el hombre dibujaba espirales y trataba de representar el ciclo del nacimiento, la muerte y el renacimiento. También se identificaba con el sol que era representado en forma de espiral. El sol nace todas las mañanas, muere tras el atardecer y renace por la mañana del día siguiente. 

También se identifica la doble espiral con representaciones de serpientes en infinidad de culturas. Para los egipcios era realmente importante ya que era un signo cósmico que representaba el movimiento, el cual equivalía a la relación entre la unidad y la multiplicidad.

Por lo tanto, algo tiene la espiral que hace que las culturas más importantes que hayan habitado el planeta Tierra la representen. Culturas como la hindú, azteca, inca, maya, egipcia, celta entre muchas otras la han tenido en cuenta para explicar fenómenos relacionados con el Universo y la evolución de la vida.